Licenciado en canto por la Escuela Superior de Música del INBA. Ha estudiado dirección con Enrique Diemecke, Digna Guerra y Alain Paris. Ha asistido a cursos de la Orquesta Barroca de Friburgo, el Ensamble Recherche y Diavolus in Musicae, entre otros. Es director artístico y fundador de Tempus Fugit, con el cual ha estrenado obras de más de treinta compositores mexicanos y actuado en diversas ediciones del Foro Internacional de Música Nueva Manuel Enríquez, en ciclos de conciertos del Colegio Nacional, el Foro de Música Nueva de Monterrey, en el Encuentro Nacional de Jóvenes Creadores del Fonca y el Festival Internacional Chihuahua, entre otros. Es director y fundador del ensamble vocal instrumental Mester de Juglaría. De 2005 a 2009 fue director artístico de la Orquesta Sinfónica de la Escuela Superior de Música. Debutó como director huésped con la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México en 2011, además ha dirigido como invitado las orquestas sinfónicas de Puebla y de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo. Ha fungido como director asistente en producciones como Rusalka de Dvořák, Fidelio de Beethoven, La vida breve de De Falla, Muerte en Venecia de Britten y La bohème de Puccini, entre otras, con la Compañía Nacional de Ópera de Bellas Artes, trabajando con directores como Nikša Bareza, Christopher Franklin, Ivan Anguelov, Sebastien Rouland, Enrique Diemecke y Enrique Patrón de Rueda.
Fuente: Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México
Fue fundado en 1984 por el maestro Rufino Montero, quien fungió como titular hasta 2009, año en que se retiró recibiendo las medallas Mozart y Bellas Artes. Ha tenido como directores huésped a maestros como Erika Kubacsek, James Demster, Horacio Franco, Josep Cabré, Samuel Pascoe, Linus Lerner, Maurizio Baldin, Pablo Varela y Xavier Ribes. En sus conciertos realizados con la Orquesta de Cámara de Bellas Artes, el grupo ha actuado bajo la dirección de Luis Herrera de la Fuente, Luis Samuel Saloma, Jesús Medina, Juan Carlos Lomónaco, Enrique Barrios y Guillermo Salvador. También ha contado con la colaboración de la Orquesta Sinfónica de la Secretaría de Marina Armada de México, bajo la dirección del capitán maestro Francisco Hernández. El grupo tiene como propósito desarrollar una actividad musical que abarca las principales etapas de la música vocal, enfocándose en esta nueva etapa en el repertorio de oratorio y ópera de cámara. Se ha distinguido ampliamente tanto por sus interpretaciones de música antigua como de música contemporánea.
Fue el primer grupo que se dio a la tarea de difundir nacional e internacionalmente la música virreinal mexicana y latinoamericana (siglos XVI a XVIII), la música romántica de los compositores mexicanos del siglo XIX, así como la música popular del siglo XX y la de compositores mexicanos del presente. Ha realizado producciones discográficas con obras de compositores del movimiento nacionalista de México: Blas Galindo, Carlos Chávez y Silvestre Revueltas, así como de Carlos Jiménez Mabarak. En los últimos años ha estrenado óperas de los maestros Roberto Bañuelas y Federico Ibarra, y ha tenido como directores de escena a Ragnar Conde, Rubén Herrera, Jorge Pais, Jaime Razzo y Moisés Manzano, entre otros.
Fuente: Música y Ópera
Los orígenes se remontan a 1963 cuando se creó el Ballet Clásico de México, por iniciativa de Celestino Gorostiza, entonces titular del Instituto Nacional de Bellas Artes al fusionar dos grupos independientes: Ballet Concierto, dirigido por Felipe Segura y el Ballet de Cámara, dirigido por Nellie Happee y Tulio de la Rosa.
A 50 años de su creación, con 38 bailarinas, 30 bailarines, 1 regisseur, 7 maestros y 1 directora, la Compañía Nacional de Danza sigue cumpliendo sus principales objetivos, entre los que se encuentran: preservar la tradición de los ballets clásicos, al mismo tiempo que enriquecerse con obras contemporáneas mexicanas e internacionales; así como crear proyectos para atraer a niños y jóvenes con el propósito de estimular su creatividad y sensibilidad, contribuyendo a lograr una mejor educación en México.
Fuente: Compañía Nacional de Danza
Una aportación de Rossini a la ópera es el ritmo vivaz de sus composiciones, algo que no se veía tan claramente en el periodo del clasicismo.
A pesar de haber compuesto gran número de óperas bufas, es curiosamente en las llamadas óperas serias, donde Rossini hace una auténtica revolución. Elimina las arias da capo y los recitativos acompañados unicamente por el clavecín, e introduce un elemento que sólo se veía en las óperas bufas: la scena esto es: recitativo, aria y cabaletta, algo que se seguirá haciendo durante todo elromanticismo, que empezará alrededor del año 1830, pero Rossini lo hace en Tancredi, una ópera seria, en 1813.
Fuente: LaOpera.net
Piotr Ilich Tchaikovski (Votkinsk, 7 de mayo de 1840 – San Petersburgo, 6 de noviembre de 1893) (Nótese que su patronímico -hijo de Iliá- se pronuncia Ilích y no Ílich) es uno de los compositores rusos más importantes del siglo XIX. A veces se puede encontrar su nombre transcrito del alfabeto cirílico en versiones similares a la francesa e inglesa (Tchaikovsky) o alemana (Tschaikowski).
Chaikovski empezó a estudiar música desde pequeño. A los cuatro años participaba en las clases de piano que recibía su hermano mayor y, a los siete, empezó a tomar lecciones, primero de un maestro local y más tarde de un profesor de Moscú, ciudad a la que se mudó la familia en el año 1848. En 1850, la familia decidió que el joven Piotr estudiara derecho y lo inscribieron en la Escuela de Jurisprudencia de San Petersburgo, en donde permaneció hasta graduarse de abogado. Paralelo a sus estudios de derecho, continuó sus estudios de piano. A los 19 años Piotr Ilich se convirtió en funcionario del Ministerio de Justicia.
Entre 1869 y 1875, la carrera de Chaikovski se consolida, lo que le proporcionó cierta estabilidad económica; su temperamento, sin embargo, era inestable, siempre oscilante entre la euforia y la depresión. En esta época compuso la obertura-fantasía Romeo y Julieta, el Cuarteto para cuerdas Nº 1, el Concierto para piano Nº 1, las sinfonías 2 y 3, la ópera Oprichnik y el célebre ballet El lago de los cisnes (estrenado el 4 de marzo de 1877).
Fuente: Last FM
〈El director de orquesta〉 en su mano derecha suele llevar una batuta con la que marca el ‘tempo’, el ritmo del compás, y su velocidad. Dependiendo de la obra sube y baja la batuta (un compás binario o dividido en dos partes), parte de abajo, va hacia la derecha y sube (compás ternario) o parte de abajo, va hacia la izquierda, hacia la derecha y arriba (compás cuaternario). Muchas veces estos movimientos para los que no son músicos son casi inapreciables debido a la velocidad con que los realiza.
La mano izquierda es la encargada de señalar las entradas de cada grupo de instrumentos o de solistas. Con todo el cuerpo y principalmente con ambas manos indica la intensidad y el carácter de la obra. Por ejemplo, si abre mucho los brazos quiere decir que les está pidiendo a los intérpretes que toquen más ‘forte’ o fuerte (esta abertura de sus brazos, sin dejar de mover las manos, puede ser también progresiva) o que toquen más ‘piano’, más suave. Con la mirada, con los ojos, con la boca… hará también mil gesticulaciones que serán importantes (según sus manías personales) para aunar la interpretación de todos los integrantes y que suene como una única obra.
Fuente: La Información
El antecedente inmediato a la orquesta sinfónica lo tenemos en las pequeñas orquestas y grupos que se formaban en el siglo XV, época en la cual tiene lugar el inicio del llamado “clásico”. En él, cobraron auge los grupos que no sobrepasaban los veinte integrantes y otros más pequeños que se formaban por indicaciones de los nobles a los que servían los compositores y en cuyas cámaras se interpretaba la música que para ese fin componían. De esta afortunada época queda la enorme producción de Johann Christian Bach, Franz Joseph Haydn y Wolfgang Amadeus Mozart, entre muchos otros.
Fuente: Cultura IPN
Aunque la figura de un líder que conduce a un grupo musical se encuentra en distintos momentos y en diferentes culturas, el conductor de orquesta como hoy lo conocemos es un invento reciente y surge en la primera mitad del siglo XIX, cuando aumenta el número de miembros dentro de las orquestas musicales. Antes, uno de los músicos –predominantemente el primer violín o el solista- se encargaba de llevar el tiempo y marcar el inicio. Su repertorio de gestos y de movimientos con las manos era necesariamente limitado. En tiempos de Beethoven el rol del director era prácticamente anodino.
Desde entonces, la función de dirigir se convirtió en una necesidad. Entre los primeros directores que no eran músicos se resaltan nombres como Richard Wagner, Héctor Berlioz y Felix Mendelssohn, quienes además de compositores incursionaron en la dirección de orquesta para imprimir su carácter a las interpretaciones. Wagner es un precursor en este aspecto: fue el primer conductor que conscientemente intentó darle forma al sonido que producía el conjunto musical. Fueron Wagner y Mahler quienes le dieron al conductor de orquesta un rol similar al de un crítico literario: alguien cuyo misterioso rol consiste en adivinar el mensaje de un creador y transmitirlo a una audiencia arrobada. Mientras Berlioz se considera el primer conductor virtuoso, a Mendelssohn se le reconoce por haber introducido el uso de la batuta de madera, aunque algunos directores como Pierre Boulez, Kurt Masur, Dimitri Mitropoulos y Leopold Stokowsky prefieren dirigir sin nada en sus manos.
Fuente: Revista Arcadia
Benedetto Lupo ha sido proclamado por la crítica como un «pianista excepcionalmente bueno … que tiene un toque notablemente hermoso y un control de tono hermoso» (The Oregonian). Elogiado por su «aguda inteligencia musical y su inteligente intelecto» (Miami Herald), y por combinar «una técnica meticulosa con la sensibilidad romántica» (Birmingham News), continúa ganando reconocimiento mundial.
Ha actuado con prestigiosas orquestas de todo el mundo, incluidas las Orquestas Filarmónicas de Los Ángeles, Malasia y Louisiana, I Musici de Montréal, la Orquesta Sinfónica Nacional de México, la Orquesta Sinfónica de Milán Giuseppe Verdi y con las orquestas sinfónicas de Chicago, Toronto , Huntsville, Calgary, Colorado, Jacksonville, Kansas City, Filadelfia, Montréal, Oregón, San Antonio, Seattle, St. Louis, Utah, Vancouver y Virginia. En Festivales como Tanglewood Festival con la Orquesta Sinfónica de Baltimore, el Festival Internacional Domain Forget con Les Violons du Roy y Le Festival de Lanaudiére.
Fuente: Dispeker
La sala de conciertos “Sala Nezahualcóyotl” es uno de los mejores recinto acústicos para conciertos y es la sede oficial de la Orquesta Filarmónica de la Universidad Nacional Autónoma de México (OFUNAM).
Ubicada dentro del Centro Cultural Universitario en Ciudad Universitaria, definitivamente es un espacio de actividad artística de enorme importancia para la UNAM y la Ciudad de México.
Fuente: Ickrom
Nació en la Ciudad de México. Es uno de los más destacados jóvenes directores de hoy. Actualmente es director de la Orquesta Sinfónica Nacional, de la Orquesta de Minería, de la Youth Orchestra of the Americas (YOA) y de la Orquesta Sinfónica de Luisiana. Fue director de la Orquesta Sinfónica de Xalapa y de la Orquesta de Huntsville (Alabama). Dirige con frecuencia numerosas orquestas de Estados Unidos, tales como las sinfónicas de Chicago, Boston y Nueva York, así como diversas orquestas de Canadá, Europa Occidental, Rusia y Japón. Ha colaborado con varios de los más brillantes solistas de la actualidad, como Yo-Yo Ma, Itzhak Perlman, Joshua Bell, Ramón Vargas y muchos más. Su grabación de obras de Erich Korngold mereció una nominación al Grammy en el 2010. Por su trabajo musical y su labor educativa fue nombrado Young Global Leader por el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza).
Fuente: Música en México
La Orquesta Sinfónica de Minería y la Academia de Música del Palacio de Minería, que la sustenta y coordina, nacieron como aquellas sociedades europeas que antaño creaban y patrocinaban conjuntos musicales, sólo por amor a la música. Obtenían donativos y organizaban conciertos por suscripción y fueron fundamentales para el desarrollo de la música desde el siglo XVIII.
En pleno siglo XX, la Facultad de Ingeniería de la UNAM rescató la tradición de los mineros del siglo XIX y en 1978, auspició la creación de la Academia de Música del Palacio de Minería y de su Orquesta Sinfónica, con el propósito de, como sucedía a principios del siglo XIX, “promover música, músicos y compositores mexicanos, buscar talentos, invitar otras orquestas y conjuntos e incluir el rescate de música perdida y de músicos olvidados de nuestro país”.
Fuente: Orquesta Sinfónica de Minería
Joseph Maurice Ravel (Ciboure, Francia, 7 de marzo de 1875 – París, 28 de diciembre de 1937) fue un compositor del siglo XX. Su obra, frecuentemente vinculada al impresionismo, muestra además un audaz estilo neoclásico y, a veces, rasgos del expresionismo, y es el fruto de una compleja herencia y de hallazgos musicales que revolucionaron la música para piano y para orquesta. Reconocido como maestro de la orquestación y por ser un meticuloso artesano, cultivando la perfección formal sin dejar de ser al mismo tiempo profundamente humano y expresivo, Ravel sobresalió por revelar « los juegos más sutiles de la inteligencia y las efusiones más ocultas del corazón » (Le Robert).
Fuente: Last FM
El 11 de junio de 1864 nació Richard Georg Strauss en Múnich, Alemania. Compositor y director de orquesta cuya larga trayectoria abarca desde el Romanticismo tardío hasta la mitad del siglo XX.
Es conocido particularmente por sus óperas, poemas sinfónicos y lieder. Strauss, junto con Gustav Mahler, representa el extraordinario florecimiento tardío del Romanticismo germánico después de Richard Wagner, en el cual un desarrollo elaborado y complejo de la orquestación se une a un estilo armónico avanzado. La música de Strauss influyó profundamente en la evolución de la música del siglo XX.
Fuente: Revista C2 Ciencia y Cultura
Ópera con música del alemán Richard Strauss (1864-1949) y libreto en alemán de Hedwig Lachmann, basado en el drama francés Salomé, del inglés Oscar Wilde, quien se basó en los temas bíblicos de dos evangelios: el de San Marcos y el de San Mateo. Se estrenó en el Königliches Opernhaus (Teatro de la Ópera de la Corte) de Dresde el 9 de diciembre de 1905, con un éxito que nunca se ha visto disminuido, a pesar de las muchas barreras con que la obra se fue encontrando, debido a su audacia argumental y musical.
Fuente: Guía de Viena
La Orquesta Sinfónica de Minería dedicará su segundo programa a uno de los compositores más admirados, MAURICE RAVEL, bajo la batuta de su director artístico, Carlos Miguel Prieto y presentando como solista al espléndido y premiado pianista italiano, Benedetto Lupo.
Maurice Ravel (Ciboure, Francia, 1875-París, 1937). Un autor que concebía su habilidad como una preciosa sutileza, un recinto mágico, excluido de la realidad y las preocupaciones cotidianas. Stravinsky lo definió con acierto como «el más perfecto relojero de todos los compositores», y así hay que ver su música: como la obra de “un artesano obsesionado por la perfección formal y técnica de su creación”.
La valse de Ravel fue el resultado de la intención que tenía, desde 1906, de componer para el ballet una apoteosis del vals en homenaje a Johann Strauss Jr. pero que la Primera Guerra Mundial le impidió realizar. La experiencia de la guerra vivida como un aniquilamiento de la civilización cambió su perspectiva de la obra que tenía en mente. A la imagen romántica y fastuosa de la corte vienesa del siglo XIX, bien ilustrada por los valses de Strauss, la sucedió la imagen de un mundo decadente amenazado siempre por la barbarie. Ravel compuso, según su propia definición, «un torbellino fantástico y fatal», suntuosa evocación de la grandeza, de la decadencia y de la destrucción de la civilización occidental.
Pavana para una infanta difunta, evoca la digna elegancia de una recepción en la corte real de España, así como el grácil movimiento de una pavana, una danza lenta procesional, que gozó de gran popularidad entre el siglo XVI y el siglo XVII. La alusión a estas referencias antiguas no significa que Ravel quisiera homenajear a alguna princesa histórica en particular, sino más bien expresar un entusiasmo nostálgico por la moda y la sensibilidad española que el autor compartía con muchos de sus contemporáneos y que manifestó en otras obras como Bolero y Rapsodia española. Una evocación de un mundo arcaico con un peculiar ritmo antiguo.
Bolero de Maurice Ravel es una composición que aglutina variadas características: Es, probablemente, la obra musical más conocida de la llamada “música clásica” (prácticamente, cualquiera puede tararear de memoria o silbar sus dos temas y tamborilear con los dedos su ostinato rítmico); es, asimismo, una de las piezas más ejecutadas en las salas de conciertos; pero, en términos estrictamente musicales, Bolero de Ravel, con su crescendo piramidal y su progresiva dinámica sonora, es la mayor lección de orquestación que haya escrito un músico. Ravel fue uno de los más grandes orquestadores en la historia de la música y un creador y experimentador de inéditas combinaciones tímbricas.
El excelente pianista italiano BENEDETTO LUPO quien, según la crítica internacional “une su meticulosa técnica con una sensibilidad romántica” se enfrentará en el ruedo musical a los dos impactantes conciertos para piano de RAVEL, el sorprendente Concierto para la mano izquierda y el brillante Concierto en Sol, que combina su predominante virtuosismo y chispa orquestal con la belleza melódica de su evocador movimiento central.
Fuente: Orquesta Sinfónica de Minería
PRIMER ACTO
Primera Escena
(Habitación del Capitán. Es temprano.
E1 Capitán está sentado frente a un espejo.
Wozzeck lo afeita)
CAPITÁN
¡Despacio Wozzeck, despacio!
¡Con suavidad!
(Descontento)
Me haces enojar.
(Se cubre los ojos y la frente con las manos.
Wozzeck se detiene, el Capitán se calma)
¿Qué haré con los diez minutos que me
sobrarán si acabas pronto?
(enérgicamente)
Wozzeck piensa
que aún puedes vivir treinta años.
¡Treinta años!
¡Trescientos sesenta meses
con todos sus días, horas y minutos!
¿Qué harás con todo ese tiempo?
(con severidad)
¡Piénsalo Wozzeck!
WOZZECK
¡Sí, mi capitán!
CAPITÁN
(enigmáticamente)
Me acongojo cuando pienso en la eternidad.
Lo eterno es eterno, eso está claro.
¡Pero la eternidad es tan sólo un instante!…
¡Un instante!
Wozzeck, me aterroriza pensar que
el mundo da una vuelta en tan sólo un día.
Por esa razón no puedo ver girar
la rueda de un molino sin deprimirme.
WOZZECK
¡Sí, mi capitán!
CAPITÁN
Wozzeck, estás siempre tan taciturno…
Eso no le sucede a un hombre honrado,
a un hombre con la conciencia tranquila.
¡Di algo Wozzeck!
¿Cómo está el tiempo hoy?
WOZZECK
Muy malo, mi capitán.
¡Hace mucho viento!
CAPITÁN
Ya veo.
Un viento así me recuerda a una barca…
(con malicia)
¿Sopla de sur a norte?
Ópera en tres actos, con música y libreto de Alban Berg, basada en el drama inconcluso Woyzeck de Georg Büchner. Fue estrenada el 14 de diciembre de 1925 en la Ópera Estatal de Berlín, siendo la primera y más famosa de las óperas de Berg.
Wozzeck se convirtió en la primera ópera larga atonal de la historia de la música, además de ser una de las pocas obras de la llamada Nueva Música que se ha afianzado en los programas de ópera internacionales.
Basándose en la historia de Büchner, Berg escribió una ópera en la que, como Adorno dijo “el nivel de la obra musical iguala al de la obra literaria”. Sin embargo, Berg no quiso en ningún caso reformar el arte formal de la ópera con su Wozzeck, sino “dar al teatro lo que pertenece al teatro. La música era tan formada que en cada momento cumpliría con su deber de servir a la acción”.
Fuente: Classic World
Escritor, novelista, periodista y editor en Czortków, Podolia (ahora Chortkiv, Ucrania), nació el 25 de octubre de 1848, falleció en Berlín el 28 de enero de 1904.
Aprendió alemán y latín, estudió derecho en Viena y Graz.
De 1874 a 1876 viajó a las tierras fronterizas del este de la monarquía de los Habsburgo y a Rusia y Rumania, viajes que produjeron material para las viñetas etnográficas que publicó primero en la prensa y más tarde en un libro en una colección de «imágenes culturales» titulada Aus Halb-Asien.(De la mitad de Asia, 1876). Posteriormente publicó su primera colección de historias, Die Juden von Barnow(Los judíos de Barnow, 1877), que representan la vida en el shtetl (villa o pueblo de Europa Oriental y Europa Central) con una numerosa población judía, antes del Holocausto.
En 1884, se convirtió en el editor de la Neue illustrierte Zeitung, mientras continuaba escribiendo prolíficamente. En esos años publicó, entre otras obras Vom Don zur Donau (Del Don al Donau, 1878), un segundo volumen en la serie Aus Halb-Asien; Moschko von Parma (Moshko del Regimiento de Parma, 1880), la historia de un soldado judío de una pequeña ciudad gallega; Ein Kampf ums Recht (Una lucha por la justicia, 1882), una novela ambientada entre los montañeses de los Cárpatos orientales.
Desde 1887, Franzos vivió en Berlín, donde hasta su muerte publicó la revista literaria Deutsche Dichtung (Poesía alemana), que incluía contribuciones de autores de gran prestigio. En 1895, estableció su propia editorial, Concordia. Su producción literaria en Berlín incluyó un tercer volumen de la serie Aus Halb-Asien, Aus der grossen Ebene (Desde la Gran Llanura, 1888), así como historias sobre la vida judía galitziana que incluyeron a «Judith Trachtenberg» (1891) y «Leib Weihnachtskuchen und sein Kind» (Leib Weihnachtskuchen [«Pastel de Navidad»] y Su Hijo, 1896).
Fuente: Iton Gadol
(1813-1837). Destacado dramaturgo de la literatura alemana, resulta tanto por su historia personal, su obra, como por la manera de aproximarse a la literatura, un escritor atípico. “La muerte de Danton”, “Woyzeck” y “Leonce y Lena” son sus únicas obras, que permanecen en todos los grandes repertorios teatrales del mundo y continúan manifestando sobre los escenarios las más lúcidas interrogaciones de los seres humanos ante su existencia. El “teatro político”, el “drama expresionista” y la “comedia del absurdo” son formas teatrales del siglo XX que amanecieron ya entonces prefiguradas, por el genio de su autor, respectivamente en estos tres dramas.
Fuente: Alternativa Teatral
Nació el 9 de febrero de 1885 en Viena, Austria, murió el 24 de diciembre de 1935,
Este compositor fue uno de los más representativos de la escuela estilística del dodecafonismo, fue alumno junto a Antón von Webern de las enseñanzas de Arnold Schoenberg en el terreno del experimento atonal, y quizás el más romántico del grupo.
En 1913 estrenó la primera de sus innovadoras composiciones. Sus obras fueron mal recibidas al principio.
En 1923 se publicó su ópera Wozzeck.
Fuente: Hágase la Música
Fígaro es un personaje de ficción que, se supone, vivió en la ciudad de Sevilla. Fue llevado al teatro con éxito por Pierre-Augustin de Beaumarchais en 1775, como protagonista de El Barbero de Sevilla. El personaje fue retomado para protagonizar distintas óperas.
Fuente: Wikipedia